#GruñoGruñoGruño
¡Hola! como ya saben este es el espacio de las
quejas, donde le desteñimos un poquito los colores al arcoíris y gruñimos por
lo que nos molesta.
Este fin de semana tuve la oportunidad de viajar
a uno de los lugares más bellos de este país, el maravilloso estado Chiapas lleno de tradiciones, paisajes y sabores deslumbrantes.
Este viaje me llevo a un gran dilema el quejarme
de las incomodidades de los autobuses y de las peripecias que uno pasa en las
terminales en un viaje transbordando, o quejarme de lo que me enteré mientras
estaba esperando el siguiente trasbordo.
Puedo dejarme llevar por la trivialidad de solo
quejarme de una situación que me molestó o quejarme de algo que me ofendió. ¿Qué fue lo que me ofendió?
La inseguridad en la ciudad que tanto amo, toda la ola de violencia en las
calles y los crímenes aberrantes que están sucediendo en Veracruz.
El 8 de Mayo apareció el cuerpo sin vida de la
joven Columba Campillo de 16 años de edad, quien fue secuestrada mientras
corría por el bulevar Ávila Camacho este hecho y la desaparición de dos jóvenes
más, detonaron el hashtag #MeDuelesVeracruz.
Sin embargo el hallazgo de los restos de Columba desató una serie de
publicaciones en las redes sociales.
Veracruz se ubica entre los diez estados con más
incidencia de feminicidios y violencia contra la mujer, Los municipios donde se
presentan mayormente estos ataques son Veracruz, Xalapa, la sierra de Zongólica
y el sur de la entidad.
Hasta el 30 de abril había 22 denuncias de
secuestro presentadas ante las instancias del ministerio público en el estado, Veracruz se encuentra en el 5° puesto con mayor índice de secuestros en México con 1.99
secuestros por cada 100 mil habitantes.
Como en la mayoría de los casos, el pueblo
veracruzano echa mano de las redes
sociales para mostrar su preocupación, miedo e inconformidad y poner en evidencia a las autoridades.
Se dice que la delincuencia aumenta porque el
gobierno no hace nada para mejorar la situación del país. Nos escudamos en que
el gobierno solo es una banda de rufianes.
Como si nosotros nos salváramos de esto, como si esto no fuera nuestra
culpa.
¡No señores! El gobierno y las autoridades tienen
culpa, pero no son los únicos culpables. Todos nosotros, consumistas, amantes
del dinero, idolatras de cosas vánales y agachados sociales. ¡Somos parte del
problema! y todos somos culpables.
Veo gente sufriendo y quejándose porque no
tienen el celular de moda, porque no tienen los tenis de marca, porque no
tienen la pantalla de 80 pulgadas que quieren, porque no tienen la bolsa
carísima de Louis Vuitton ultima temporada, cosas materiales sin sentido real.
Pero casi no veo gente sufriendo y quejándose
porque no tiene paz y seguridad, si
esta sociedad no se hubiera vuelto consumista y ambiciosa no pasaran crímenes
tan aberrantes, la vida humana no tiene
precio y aun así le ponemos cifras.
¿Cuándo dejamos de amar a nuestro hermano? ¿Cuándo
se nos olvidó que dar es mejor que recibir? ¿Cuándo dejamos de pensar que todos
merecemos las mismas oportunidades? ¿Cómo dejamos que esto se saliera de
control?
Sin embargo creo que debemos detenernos y vernos
las caras los unos a los otros, el problema
no está solo en las autoridades, también está en nosotros como sociedad. ¿Cuándo
dejamos que el dinero dictara nuestras vidas? ¿Cuándo nos pusimos precio a
nosotros mismos?
El cambio empieza
por nosotros, seamos
honrados, ayudemos al necesitado, inculquemos buenos valores a nuestros hijos,
sobrinos, nietos, no hagamos de ellos esclavos del dinero, porque cuando alguien es esclavo del dinero y
no lo tiene, buscará la forma fácil de
conseguirlo. Y esa forma fácil, es la que tiene jodido al prójimo y a este
país.
No nos quejemos porque no tenemos cosas
materiales, quejémonos porque no tenemos seguridad, paz y oportunidades. Seamos
más críticos, seamos más amables, ayudemos al prójimo y veremos un verdadero
cambio.