Nuestras existencias cambian
radicalmente en un instante, por eso sabiamente se dice que no hay
mañana, solo HOY, porque definitivamente hoy es el tiempo de amar, de perdonar,
servir, pero sobre todo de VIVIR.
Amamos a nuestra familia, y daríamos lo que
fuera por evitarles dolor o sufrimientos, amamos a nuestros amigos, compañeros
de viaje de esta vida, amamos a quienes nos aman, el amor es como una onda
expansiva que va abarcando cada vez a más personas, porque el amor es el
sentimiento más noble que podemos poseer, podemos incluso decir que el amor lo
es todo.
Hoy es el día de perdonar, hace unos días
falleció un joven padre , por algunas circunstancias la familia se hallaba
distanciada, la madre decía que cuando ella falleciera el hijo lloraría
lágrimas de sangre , un accidente
truncó esa vida, dejó
arrepentimiento y remordimiento en esa madre, si uno pudiera regresar el tiempo, buscaría más oportunidades de perdonar o pedir perdón, al hacerlo
oportunamente alejamos de nosotros los sentimientos de culpa, de dolor y de
angustia, quien perdona se libera de una pesada carga, muchas enfermedades se acrecientan
o generan por los sentimientos negativos que vamos acumulando, que importante
sería entender esto para hacernos más llevadera y feliz la existencia.
Servir, aquel que hace del servicio su
vocación, experimentará sensaciones únicas y especiales, aprenderá por experiencia propia que aquello
que se siembra se cosecha, que el bien que uno hace se regresa de manera abundante aún cuando ese no sea el motivo por el que se
sirve, se dice que es mejor Dar que
recibir y yo digo que es mejor servir y aceptar ser servido, quien sirve se aleja de la mezquindad, de su ser
emana la bondad, porque esto no sólo se manifiesta en sus hechos, aun su rostro
refleja lo que de El lleva dentro, todos necesitamos servir porque nuestro
mundo sería mejor si cada uno pusiera algo de su parte por hacerlo más amable, más humano, mas
cohabitable.
Vivir, necesitamos urgentemente hacer un
alto en el camino, analizar nuestras prioridades, darle a cada cosa su lugar,
ésta última semana he paseado entre la vida y la muerte, he estado por una
situación familiar en el Hospital, y he vivido de cerca experiencias
maraviillosas, pero también es cierto que he visto situaciones lamentables,
salen personas alegres con su carga, una
nueva vida que les alegra la propia, pero ha sido terrible ver llorar a una
madre porque su pequeño hijo de 4 años no pudo superar una septicemia originada
por una apendicitis.
Y entonces me puse a reflexionar en que es lo
que realmente importa en la vida, por ello pensaba lo necesario que es levantarse cada día, agradecer que
estamos vivos, mirarnos al espejo y sonreírnos y darnos cuenta del maravilloso
don que tenemos de abrir nuestros ojos, muchos ya no lo podrán volver a hacer-
Hoy es el momento de aprovechar cada
instante que tenemos, después de todo nadie tiene asegurada la vida, y cada día
es volver a nacer, porque muchos al salir de casa no sabemos si ese instante
será el último que nuestros seres recordarán de nosotros, por ello sonríe a tus seres amados, abrázalos,
bésalos, disfrútalos, dales la oportunidad
de tener bellos momentos , esfuérzate
por darles una herencia que no cause envidias ni ambición pero que para ellos
sea un maravilloso e inolvidable
recuerdo, podemos estar muertos en
vida o vivir intensamente disfrutando lo que Dios nos da como regalo al abrir nuestros ojos
cada día, no olvides que sólo tienes
como seguro el día de hoy .
Autor: ARACELI CANAAN DE GUEVARA
#LaPromesaDelViento
#Conectados