Infidelidad

 ¿Dónde empieza? ¿Qué se considera infidelidad? Situación bastante difícil, incomoda y dolorosa, el hecho de imaginar o afrontar  que tu pareja, la persona que amas,  con quien has compartido momentos llenos de felicidad, rompe con su promesa de exclusividad, la promesa de amarte solo a ti como su pareja.   


Para muchos la infidelidad solo se considera valida cuando se realizan relaciones extra pareja relacionadas con el sexo, pero no es así, al menos a mi punto de vista, la semilla de la infidelidad se siembra desde el momento en que “te gusta” alguien más, y empiezas a dedicarle tus pensamientos a esa persona, tu mente empieza  a divagar y a crear situaciones ideales compartidas con quien no es tu pareja, creyendo encontrar eso que te falta en tu relación, aquello que se ha perdido con el tiempo o simplemente lo que nunca has encontrado.

Una vez sembrada la semilla, empiezas a realizar acciones que lleven a esas “situaciones ideales”: platicas por las redes sociales, llamadas, salidas al café, horas de comida compartidas, que empiezan de forma casual e “inocente”, y que rápidamente se vuelven más frecuentes y prolongadas, casi siempre a escondidas de tu pareja. Y como “nadie puede mantener 2 relaciones sin descuidar alguna de las dos”; poco a poco se reduce el tiempo dedicado a tu pareja, el interés, los detalles, Los “te extraño”, “Te Amo”, hay más discusiones y desacuerdos, crees que no hay comprensión y corres a refugiarte en “esa nueva ilusión”, la cual puedes tener porque cumple con todos tus supuestos ideales escasos en tu relación formal o simplemente como una aventura que satisface tu pasión.

Sea por lo que sea siempre me he preguntado, ¿Por qué no ser simplemente honestos y terminar con tu relación formal e iniciar a conocer a más personas? ¿Por qué engañar? Si las cosas ya no están saliendo bien, si ya hubo comunicación y se dieron nuevas oportunidades y no resulta, lo más sano es terminar. Siempre he escuchado: “Se dieron las cosas”, “es que no me dedicabas tiempo”, “Ella/El si me escucha”, “Me trata como lo merezco” Etc. Mientras que la otra parte se la pasa sufriendo y preguntándose, ¿Qué hice mal?, y es muy cierto, siempre una relación de pareja es de Dos, ambos deben poner de su parte y esforzarse por que la relación este fortalecida, pero sinceramente creo que no es excusa el hecho de que si sientes que las cosas no van bien y que tu pareja ya no te hace feliz con eso justificar una infidelidad. Porque es mentira que las cosas se dan, siempre pensamos lo que haremos antes de actuar, sobre todo en este tipo de situaciones, porque si uno quiere aun en la situación más comprometedora o más tentadora podríamos hacer lo que sea para evitar traicionar a la persona que amamos, ¿curioso no? Llegar a engañar o que te engañe la persona que te ama.

Y la pregunta final ¿Perdonarías una infidelidad? Creo que es muy difícil, que se necesita de mucha madurez para decidir perdonar y esforzarte diariamente por que la relación vuelva a funcionar, porque tampoco esta tan padre que digas: “si te perdono” y luego con el tiempo te la pases recordando que te engañaron. Cada quien tiene su punto de vista, su propia experiencia o su propia teoría de lo que harían si les llegara a suceder. En lo personal creo que es muy sano y maduro, sí, perdonar, dejando el rencor y resentimiento de lado y decidir no seguir con la relación, al menos yo no lo haría.

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Autor: Tere Santamand

     

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