Te buscaré, aunque la lucha sea cruel, aunque la jornada ardua
Eres el motor que me impulsa a vivir y a levantarme.
Buscarte hasta encontrarte, no cejare ni aflojaré el paso,
Únicamente ese es ahora el motivo de mi existencia.
Saber que fue de ti, y donde te encuentras, necesito
Conocer tu paradero para poder tener un poco de paz.
Añoro las cosas vividas, los días en que reía contento. Tu
Recuerdo me anima cuando siento que ya no puedo más.
Esperanzado imploro a Dios todos los días por el milagro de
hallarte, de poderte abrazar y decirte cuánto te amo.
Aunque a veces pienso que pudieron quitarte la vida, me
Sume en una inmensa tristeza, pero tener donde llorarte
También calmaría mi inquietante búsqueda y sabría que
Allende la vida volveré a tenerte para nunca jamás dejarte.
Eres mi aliciente, mi esperanza en medio de la desesperación.
Nadie, sólo los que sufrimos la pérdida de un ser Amado
Comprenderá plenamente este dolor agonizante.
Ofrendo a Dios mi fe, me esperanza y hasta mi vida porque
Nada llena el vacío que tu ausencia ha dejado.
Todo ha dejado de tener sentido pues tu ausencia duele y tus
Risas se extrañan como nadie lo imagina. Eres mi ilusión el
Amor que han arrancado de mis brazos y de mi pecho.
Ruego a Dios conocer pronto tu paradero para sentir paz, para
Tener tranquilidad, porque cuando te alejaron de mi vida,
Ellos me clavaron una daga que sangra cada día
HASTA ENCONTRARTE.
Con amor: ARACELI CANAAN RAMIREZ
*Las ideas plasmadas en los artículos, son responsabilidad de quien las escribe*.