¿Qué es el tiempo?, son
instantes de todo. De hecho, la vida se va formando de instantes y de
situaciones, pensando por qué una extraordinaria fotógrafa escogió éste título
para su trabajo me hizo reflexionar en eso precisamente, es un instante el que
necesitas para irrumpir a la vida y cambiar el dolor de una mujer parturienta
en gozo, es un momento en el que se te atraviesa el tren para que pierdas el
autobús que te llevaría al Aeropuerto y te hace perder un vuelo internacional.
Es tan valiosa esa fracción de segundos, que pueden ser la diferencia entre la
vida y la muerte para una persona que necesita con urgencia atención médica. Es
un instante el que se necesita para perder la cabeza y la cordura, llegar a
cometer algún acto del que posteriormente puedas llegar a arrepentirte, es un
instante de cegar la razón provocando un zafarrancho en el que puedes
involucrarte y puedas salir lastimado o lastimar a alguien con sus lamentables
consecuencias, se necesita mucho tiempo para construir la autoestima de una
persona y sólo un instante y palabras hirientes para destruirla.
Los instantes son momentos que
van haciendo nuestra historia y nuestra vida. De no ser por aquéllos hermosos satisfactorios,
no podríamos soportar los embates que nos enfrenta cada día la existencia.
Plasmar en una fotografía la
evidencia de los instantes felices, hace que cuando la veamos recordemos y
volvamos a experimentar ese sentimiento de felicidad, ¿quién no ha sonreído al
ver la fotografía donde lucía hermosa, regordeta, infantil, portando peinados
de otra época, con una sonrisa amplia y sincera sin cuidar las poses, cuando
disfrazada de flor o de paje participaba en el kínder en los festivales? Los álbumes
están llenos de instantes, abrirlos y vernos en la celebración de nuestra boda,
se dice que no hay novia fea, todas sin excepción muestran una cara de
satisfacción y plenitud, al vernos nos recuerda que muchas hemos perdido figura
y ganado peso, pero también hemos ganado otras satisfacciones, hemos tenido
instantes que no cambiaríamos por nada. Los paseos familiares, las Navidades en
familia, aunque algunos seres amados se nos hayan adelantado y ahora sólo los
recordemos por esos instantes capturados en papel y atesorados en el corazón.
Los instantes hacen la
diferencia en todo, pensando en una reciente experiencia vivida por unos
familiares y amigos , un instante fue decisivo para que una persona no fuera
alcanzada por una bala, el moverse inconscientemente, un instante a veces nos
salva la vida, el no salir de un lugar y atravesarse en el camino de algún
maleante, el tomar un taxi en el preciso
y precioso instante, a veces nos evita estar en un mal momento,
realmente nadie puede decir que los instantes no son algo maravilloso, pero así como estamos hablando de cosas
bellas, también en un instante nos cambia la vida, y así se suceden las cosas,
en instantes, podemos sufrir un accidente, un choque, un atropellamiento, un
secuestro, todo absolutamente todo pasa en un instante.
Por lo que debemos llenar
nuestros instantes de agradables momentos, de dulces y tiernos recuerdos, de
amistades eternas, de servicio, de cooperatividad, de aquello que nos gusta y
nos llena de satisfacción, hay instantes que para algunos duran una eternidad,
el caso podría ser tener un enfermo postrado, una enfermedad terminal, una
desilusión, un fracaso, una angustia, y hasta quizás el perder a un ser amado, aunque
ocurre en un instante se requiere de mucha fuerza y ayuda para superar esos
largos instantes de nuestra existencia.
Debemos valorar todos los
instantes que tenemos, controlar la ira y lo temperamental que seamos, vivimos
en una época en que la gente parece estar irritada por todo, es demasiado
visceral, es de reacción explosiva, en un instante se enciende, muchas
desgracias podrían evitarse si la gente pensara un poco antes de actuar.
Otra sería la vida, llenamos
el Facebook y el Whatsap de pensamientos positivos, de invitación a la
reflexión, pero en la práctica le quedamos a deber a la familia, a los amigos,
pensemos por un instante cuanto bien podemos hacer al decidir ser más amables,
más amorosos, en fin, un instante del día para ayudar a otros.
Mis felicitaciones para esa
personita especial que captura INSTANTES, que aparte de enfocar el lente,
ajusta sentimientos e imprime en su tomas, pasión amor y ética, gracias porque ese trabajo
cobrará importancia tal vez pasado el tiempo, cuando alguien sentado en un
sillón le enseñe a sus nietos las vivencias capturadas por ésa mágica cámara
nadie sabe cuánto valorará en un futuro esos instantes mágicos.
Así que qué es la Vida
Terrenal contra la Eternidad, es sólo un instante, vivámoslo con intensidad.
Por Araceli Canaan de Guevara.
*Las ideas plasmadas en los artículos, son responsabilidad de quien las escribe*.




