No hay nada más triste que
saborear unas ricas tortillas de harina (oh yumi yumi!!) abrir la bolsa, poder
escuchar casi ángeles y ¡bam! Abres la bolsa, y la harina esta negra y llena de
animalitos indeseables.

No sé si esto solo me suceda a mi como
inexperta en la cocina, pero si bien, es muy importante cocinar rico, también
es de suma importancia tener todos nuestros ingredientes frescos y en perfectas
condiciones, no solo para nuestro consumo casi inmediato sino para tener un
pequeño almacén familiar, actualmente vivimos (por lo menos en México) una
incertidumbre con respecto a nuestra
economía y no creo que nadie se pueda dar el lujo de tirar comida a la basura
(lo que pasa si esta se echa a perder) no está de más el tener una despensa de
emergencia, por lo menos en mi familia,
mis hermanos y yo somos scouts, hemos participado en varios centros de acopio,
así que somos muy conscientes de que un desastre natural llega de la nada, te
quita todo y nadie está exento de esto.
Y el hecho de tener un par de
cosas en casa puede hacer la diferencia, siempre y cuando sepamos que tener y
como guardarlo.
En la clase nos enseñaron como
sellar al vacío de una manera fácil, casera y efectiva, solo necesitaremos
granos, (frijol, lenteja, avena, amaranto, arroz, etc) este tipo de envasado no
funciona para harina, (para este tipo de alimentos así como la leche en polvo,
se utiliza una pastilla) hojas de laurel) botellas de plástico (pet, la que se usan en los refrescos y de preferencia
los envases retornables que son más gruesos), algodón, alcohol, papel aluminio,
serillos y cinta de aluminio (esta se compra
donde reparan refrigeradores o en home depot).
El proceso es sencillo, al
principio cuando me dijeron que debíamos encender el algodón dentro de la
botella, me dio miedo ya veía el incendio sucediendo hahaha pero es realmente fácil, digamos que es un
incendio controlado:
1.- Las botellas deben sestar
limpias y súper secas. Pueden ser de un litro o dos.
2.- Meter los granos con ayuda
de un embudo o con la mano a la botella hasta la mitad y ponerle dos hojas de
laurel.
3.- llenar la botella y en la
parte de arriba, poner otras dos hojas de laurel.
4.- hacer un mini cono de
papel aluminio (este debe caber en el orificio de la botella y queda casi al
borde.) ponerle en medio una bolita de
algodón empapada en alcohol.
5.- Metemos el cono con el
algodón, en la botella y le prendemos con un cerillo, rápido y con la flama aun
encendida tapamos la botella y la flama se extinguirá cuando se acabe el oxígeno, esto hará que sea
un sellado al vacío.
6.- con la botella bien cerrada,
pondremos la cinta de aluminio por encima y alrededor (dos tiras de 15 cm,
aproximadamente) así nuestro grano está seguro hasta en caso de una inundación,
al final hay que recordar que debemos etiquetar con fecha y este tipo de
envasado dura entre 3 y 5 años.
Guardamos la botella en un
lugar seco y obscuro.
No sé qué aventura nos depare
esta semana, pero estén atentos a mis redes sociales donde les contare cual es
el reto…. Deséenme suerte.
Por Ilse Barco.
*Las ideas plasmadas en los artículos, son responsabilidad de quien las escribe*.